Redacción/
Ciudad de México, México
La politización de las elecciones es un fenómeno que afecta a decenas de naciones en el mundo, sin embargo el Presidente de México Andrés Manuel López Obrador se lavó las manos ante las acusaciones en su contra de convertir el proceso electoral en un ring partidista y llevar a sus adversarios a la escena jurídica para evitar que ganen las elecciones en sus entidades federativas.
En una conferencia de prensa que tiene por costumbre dar cada mañana desde Palacio Nacional conocida como «la mañanera», el mandatario federal dijo que no persiguen a nadie, refiriéndose al caso de la solicitud de desafuero del Gobernador de Tamaulipas Francisco Javier García Cabeza de Vaca.
En un evidente enfrentamiento partidista entre MORENA (partido afín al Presidente) y el PAN (Partido Acción Nacional afín al gobernante tamaulipeco) , el Presidente de México justificó la acción con sus ya conocidas frases «tampoco somos tapadera de nadie».